La navidad del 2011 tuvo para mí un regalo inesperado,
pero bien atesorado. Desde Arica, Pablo Espinoza Bardi me enviaba tres libros
de su autoría publicados en Cinosargo Ediciones, a modo de regalo: “Necrospectiva
Vol. 1”; “Necorospectiva Vol. 2 Cuentos de gore, de locura y de muerte”; y “La
maldición de los Whateley’s y otros relatos”. Mi intención original fue
escribir un artículo literario sobre su obra, sin embargo, me encontré con unos
cuantos artículos que trataban sus libros por separado y que por lo demás que
estaban muy bien escritos. Decidí entonces realizarle una entrevista. Esto creo
es de mucha utilidad, pues servirá para desenmascarar a quién está detrás de
semejantes narraciones que causan tanto impacto entre quienes han conseguido
sus libros.
Pablo Espinoza
Bardi, ¿cómo te autodefines en la literatura, cómo llegas a ella y hacia dónde
te diriges?
En ocasiones me juntaba con un amigo. Mientras
escuchábamos bandas como “Devil Doll”, “Univers Zero”, “Jacula” y algunas
bandas sonoras de películas de terror que servían de cortina musical para
hablar sobre lo Lovecraftiano y autores que estaban dentro de ese círculo.
También comentábamos sobre los libros que habíamos leído, además me mostraba
sus propios textos para darle mi opinión. Entonces me dije: “¿Por qué no
empezar a escribir los míos?”. Así nació mi primer cuento; “El Ser en el
Mausoleo”. Eso fue como en el 2004, 2005.
Los años siguientes continué escribiendo. Siempre
textos relacionados con el tema Lovecraftiano y lo relacionado con el terror,
claro que a modo de hobby.
El 2009 entré al taller de la universidad de
Tarapacá, gracias al dato de un buen amigo. Creo que en ese entonces comencé a
tomar más en serio esto. Empecé a leer mucho más, a descubrir nuevos autores y
a conocer otros que con el tiempo se transformaron en buenos amigos.
En Chile sólo conozco a tres personas que se dedican
a este género. Ignoro si hay más… deben haber, eso creo.
¿Quiénes son
esos tres?
Bueno, mi amigo Adrian, de quién obtuve la motivación
de escribir. Él aún no ha publicado y la verdad espero que lo haga algún día,
pues como comentaba, empezó mucho antes que yo.
Luego
conocía a Omar Pérez Santiago en la Feria del Libro de Antofagasta (Filzic
2011), quién me obsequió su libro "Nefilim en Alhue y otros Relatos de la
Muerte". La verdad quedé muy impresionado pues lo que estaba leyendo de
cierta forma se conectaba con lo mío…, otra forma de ver el terror. Un terror
sucio y crudo.
Y bueno, por intermedio de la editorial me
contactaste y pude conocer tu trabajo a través de tu blog.
¿Cuánto de
vivir en el norte de Chile ha incidido en tu narrativa?
Nada.
Pero esta
circunstancia fronteriza permite una apreciación de la literatura de nuestros
vecinos, ¿crees que existe alguna diferencia temática o estilística en el
trabajo literario de los países vecinos y qué determina este contraste?
Al principio no sabía nada de la literatura de países
vecinos, me refiero a una narrativa actual. Todo lo que me influenció vino de
"escritores ya muertos", de Estados Unidos la mayoría. Ahora que
tengo más contacto con amigos de Perú, noto que la narrativa del género del terror
tiende a un estilo mucho más clásico. Algo correcto y limpio.
Muchos de los
relatos que escribes no son cuentos propiamente tal, a mi modo de ver, son
viñetas grotescas recreadas por el lenguaje que mantienen la tensión y
curiosidad, ¿cómo es que se da este proceso creativo?
El proceso creativo viene por el gusto al cine, los
comics y la literatura relacionada con el terror. Desde los 11 años que soy un
fanático de los comics, desde que a mi ciudad comenzaron a llegar semanalmente
revistas como “Conan el Bárbaro”, “Kaliman” y los de la editorial argentina
“Perfil”, con títulos como “Batman”, “Superman”, “La Liga de la Justicia y
“Flushman” (que en realidad era “Flash”, pero la editorial no pudo obtener los
derechos) y todos los números especiales, en el que mi favorito fue “La Broma
Asesina” de Alan Moore. También recuerdo, con mucha nostalgia, que mi madre me
obsequió un comic llamado “Puertitas del Terror”, en el que venía un prólogo
hecho por Stephen King. En ella, había historias de asesinos en serie,
psicópatas y algunas de carácter más sobrenatural. Luego a los 12, con la
llegada del VHS a la casa, vinieron todas esas tardes de películas de terror,
que eran para mayores de 21 en ese tiempo, pero que el sujeto del video club
las arrendaba a un menor sin ningún problema. Así conocí el cine “Gore”, el
“Slasher” y el “Giallo”. A los 12 años mi mente explotó con todas esas imágenes
chocantes de "Holocausto Caníbal", "Bad Taste",
“Nekromantik”, “Terror en la Ópera”, “La Casa cercana al Cementerio”, “Slumber
party Massacre” y un sinfín de películas “clase B” cuyo condimento primordial
era sangre, sexo y muerte.
Luego,
en la literatura, vinieron autores como Algernon Blackwood, Edgar Allan Poe,
Lord Dunsany, Arthur Machen, Frank Belknap Long, William Hope Hodgson, Augusth
Derleth, Robert E. Howard, Clark Ashton Smith y por supuesto H.P Lovecraft. Con
el tiempo leí a Isidore Ducasse, Juan Rodolfo Wilcock (una gran influencia para
el Necrospectiva vol. 1, debo admitir), Charles Baudelaire y Charles Bukouski (uno
de mis favoritos).
Trato de que mis textos suenen y se lean de una forma
esquizofrénica. Escribir en segunda persona me ayuda bastante, y así reflejar
esa voz interna y enferma. Además de lanzar palabras que te vengan a la mente
sin forzarlas demasiado. Me gusta trabajar con la estructura del texto. Ver en
qué parte “apresurar” el ritmo y eso se logra gracias a la música. Dar una
sonoridad que al leerla sea atractiva y a su vez visualmente delirante. Leer
poesía me ha ayudado mucho para logra eso.
¿Hay alguna película gore que
nuble tus pesadillas y que sea parte de tu literatura? Podrías recomendarnos
alguna.
Recuerdo que me angustió demasiado cuando niño la
película “La Casa Cercana al Cementerio” de Lucio Fulci. La primera vez que la
vi me hizo sentir muy mal, además, la magistral banda sonora hecha por Walter
Rizzati era tremenda y ayudaba bastante a esa sensación.
Mis películas favoritas y que podría recomendarte
son: The Texas Chainsaw Massacre 1 y 2 de Tobe Hooper. Las de Lucio Fulci, como
"La Casa Cercana al Cementerio", "The Beyond", "El
Descuartizador de Nueva York”. De Dario Argento; “Suspiria”, “Profondo Rosso”,
“Inferno” y “El Pájaro de las plumas de Cristal”. De Stuart Gordon la genial
“Castle Freak”, “Re-Animator” y “Dagón”. “Santa Sangre” de Alejandro Jodorowsky“. “In the mouth of Madness” de
John Carpenter. Carretera Perdida” y “Eraserhead” de David Lynch.
“Holocausto Cannibal” de Ruggero Deodato. De Peter Jackson “Bad Taste” y
“Braindead”. Las de culto “The Evil Dead” y “Evil Dead II” de Sam Raimi.
“Nekromantik” de Jôrg Buttgereit. Obras “cutres” pero de culto de los
directores Jess Franco y Jean Rollin... en fin, podría seguir y seguir. Todas
ellas forman parte de lo que hago.
Se evidencia
un gusto por las tecnologías audiovisuales llevadas al relato, es un área que
desarrollas paralelamente o simplemente una manera de innovar en tus cuentos.
Lamentablemente no desarrollo esa área.
La innovación nace de uno. De ver reflejado en papel
lo que “a uno le gusta o gustaría ver”. Pienso que ahora el Terror debe ser mucho más dinámico, como un
machetazo en la cabeza que no te dé tiempo de reaccionar. Es algo que debe
hacerte sentir mal, jugar con tus sentimientos.... eso trato de mostrar en mis
textos. Mostrarte “viñetas” e “imágenes” que queden insertas en tu mente
como un viral.
El cine,
música, fotografía y la literatura gore, ¿es para ti, un modo de vida o una
forma de expresar algo más?
Todo lo que nombras trato de meterlo en una “juguera”
y esperar que sale. Todo va de la mano en realidad. Forma de vida absolutamente
no. Me inclino por lo segundo… expresar algo.
¿Cuáles son
tus influencias literarias en Chile, sí es que las hay?
No tengo ninguna, y me considero un ignorante en ese
sentido.
El 2010
publicas con Cinosargo Ediciones, Necrospectiva Vol. 1, ¿qué tal la experiencia
y cómo se arma este libro debut?
Fue una experiencia muy buena... aunque con el tiempo
te dices: Quizás pude hacerlo así, o esto de esta manera. Fue algo que salió
muy rápido. Hice una recopilación de textos desde el 2006 al 2010. En lo
personal, es un libro que me gustaría sacar de nuevo, agregar nuevos relatos...
armar algo grande.
Necro. Vol. 1
tiene una dedicatoria bastante especial (Al “viejo loco” de mi padre) ¿cuán
culpable es él de tus gustos literarios?
No, en gustos literarios absolutamente nada.
Si me influenció en algo podría decir que fue en el
dibujo, y en el gusto por los Westerns Italianos.
Tricofobia es
el cuento más largo de Necro. Vol. 1, a mi juicio el mejor logrado ¿De dónde
surge la idea de escribir sobre esta fobia?
Siempre cuando escribo lo hago a partir de "mis
fobias" o sucesos que me hayan marcado y luego les agrego unos toques de
ficción. La verdad me desagrada el pelo en duchas o bañeras. El pelo ajeno. Los
bichos que nacen de la humedad, en realidad la mayoría de insectos, pues si te
das cuenta, escribo mucho sobre ellos... quizás para exorcizar parte de esa
"fobia".
Del Necrospectiva vol.1 es uno de mis relatos
favoritos, junto con “Rancio”, “Sommeil Paradoxal” y “Creación de una mente
Asesina”.
Precisamente,
en Rancio hay una imagen increíblemente lograda, ¿de dónde salen estos
monstruos y sus perversiones?
De las películas que te comentaba. También me fascina
el cine de terror en blanco y negro y esa historia la imaginé en ese formato;
con toques de "Poe",
algo de “EL Usurpador de cadáveres” y “Masacre en Texas”… y claro, mis
recurrentes fijaciones.
El dedicarse a
este tipo de relatos te ha significado algún efecto colateral en lo personal,
laboral o familiar que nos puedas confidenciar.
En lo personal, laboral y familiar nada. Aunque hay
gente que desconfía y piensa que ando con una navaja o algo así... algunos se
horrorizan y olvidan que en el fondo es arte y una forma más de expresión, como
el cine, la música, la pintura, el comic, en donde lo que hago también es
reflejado y en ocasiones con mucha más crudeza... pero bueno, siempre habrá
crítica, sea buena o mala. Hay de todo.
Por eso te lo
pregunto, hay persona que les cuesta mucho hacer la separación entre Escritor y
Narrador o personaje
Creo que se inclinan a pensar: "¿Y eso sale de
su cabeza?", "¡Debe ser un monstruo!, un mal tipo". Pero en
verdad es lo que menos me preocupa.
El 2011 se
publica “Necrospectiva Vol. 2, Cuentos de Gore, de locura y de muerte” y está
dedicado a cinco personas; Fulci, Gordon, Argento, Hooper y Lynch. ¿Cuál es la
razón, cuál es la influencia?
Toda. Su cine me marcó. El “Necro-2” (en lo personal)
es mi libro mejor logrado. Fue pensado así. A veces escribía 3 cuentos por día,
otros salían en 10 minutos, estaba muy inspirado y ya había adquirido cierta
experiencia. Leer poesía me sirvió muchísimo para jugar con los ritmos. Mis
textos son muy visuales, por lo mismo, por la influencia de las películas. Así
que soy una suerte de director de cine frustrado y que debe contentarse sólo
con escribir esas historias.
En un cuento que aparecerá prontamente
en una antología mencionas a Joel Peter Witkin, ¿también podría haber estado
ahí no?
Claro,
también podría haber estado John Carpenter, David Cronenberg y Tarantino. Pero
esos 5 directores que mencionas son los que más me han influenciado.
Alfred Fish el
personaje perfecto para tus relatos, el problema es que fue una persona real
¿cuál es tu opinión sobre él?
El libro habla de Monstruos Urbanos. Me inspiré en
Fish pues es un pobre anciano, que si lo ves en la calle piensas: “Pero si no
es capaz de matar una mosca”. La
idea de ese libro es reflejar que estamos por debajo de una cadena alimenticia,
que debes sentir terror cada vez que sales a la calle..., algo como el
"Lobo", en donde todos somos una "caperucita" en potencia.
Necro. Vol. 2
tiene muchos epígrafes, ¿cómo operan en tu narrativa?
Como un Soundtrack. Sólo eso.
En los dos
volúmenes de Necrospectiva se ve una intención transgresora en el formato de
los cuentos, sin embargo, en La maldición de los Wateley’s se produce un
retorno a la formalidad, ¿Cuál es la razón del cambio?
Es lo curioso de todo. Esos textos fueron los
primeros que creé. El Ser en el Mausoleo fue el primero que escribí en mi vida.
Luego siguió La Maldición de los Whateley's. Estuvieron mucho tiempo en un
cuaderno escrito con lapicera. No creo que haya un cambio, al contrario, pues
aún sigo trabajando en textos como los “Necrospectivas”. La “Maldición de los
Whateley´s y otros relatos” es un libro tributo, nada más que eso.
Tu tercer
libro La maldición de los Wateley´s y otros relatos es un completo homenaje a
Lovecraft, ¿Cómo nace la idea de escribirlo?
Como te contaba, eran textos que ya tenía... estaban
"guardados en un baúl". Ese libro fue una suerte de paréntesis en mi
narrativa, para no encasillarme sólo en "letras esquizofrénicas”. Quería
mostrar un tipo de narrativa que me gusta y respeto mucho. Es algo que deseaba
hacer.
¿Qué es lo que
más te seduce del universo creado por Lovecraft?
El terror cósmico, ancestral. La pequeñez del ser
humano frente a situaciones que se salgan de su control.
"Somos tan sólo insectos en un mundo que no nos
pertenece".
Todos los
escritores de terror o de registros similares a Weird Tales rinden homenaje en
algún momento al maestro Lovecraft, ¿cómo evitas convertirte en una especie de
fanfic de Lovecraft?
Bueno, teniendo un estilo propio, como es el caso de
"necro" 1 y 2. En los Whateley's agrego algo de lo mío, que es el
humor negro (Como el cuento “Mr. Berneth”). También evité el exceso de
adjetivos tan característico en la obras del "Maestro de Providence",
en fin, también dejar impreso un sello propio.
¿Cuál de estas
personalidades te identifica y cuál te gustaría poseer o cuál detestarías ser?
Narcisista, voyerista, psicótico, melómano, altruista, fetichista, pirómano,
ambivalente, asesino en serie, perfeccionista, mitómano, otros
Es una difícil pregunta en realidad. Ninguna de las
que planteas me atrae. Puede que me considere algo Misántropo, por decir algo.
De escoger alguna, me seduce la idea de ser un asesino en serie. Pero no de
esta época. Tengo la siguiente escena en mi cabeza: “Caminar por calles repletas de adoquines húmedos, con una niebla
fantasmal, vestido de caballero Inglés, con sombrero de copa… provisto tan sólo
de una navaja. Luego tomar el té con Isidore Ducasse, mientras hablamos de
proyectos literarios en conjunto”.
*** y cómo se
puede ser misántropo y escritor a la vez, teniendo en cuenta que se escribe
para un público formado precisamente por aquellos a los que detestas.
El escribir es una "pega" solitaria, es lo
mejor de todo. Quizás "Misántropo" en cierta medida.... Cómo el
racismo y odio hacia la humanidad de Lovecraft que mostraba en una infinidad de
artículos, pero que en el común de la vida se mostraba muy amable y respetuoso
frente a cualquier persona.
No me gusta la gente. La mayoría de las veces trato
de evitarlas. Sólo comparto con mis cercanos, y eso para mí está bien. El
escribir me ha hecho conocer a más personas, pero lo importante es que se
mueven dentro de un "círculo", un círculo que comprendo y entiendo...
el resto no me interesa.
¿Qué es la
muerte para ti, cómo la concibes?
Me atrae la muerte en todas sus facetas. Pero me
atrae en lo que a ente creador respecta y cómo esta pueda inspirarme. Da ahí el
nombre de “Necrospectiva”. "Un punto de vista y una perspectiva de la
muerte", ya sea física, mental u en otro plano de la realidad.
¿El fenómeno
Cinosargo, qué significa para ti y cómo crees serían las cosas sin la
iniciativa de Daniel Rojas Pachas?
El 2009 conocí a Daniel, a quién considero un gran
amigo. Apuntamos para el mismo lado y eso es lo fundamental.
Pienso que es algo necesario para este medio. Quizás
para muchos sea como una piedra en el zapato, pero así se rompen esquemas,
pateando los culos de aquellos seres que descansan en convicciones añejas.
Mostrar algo fresco, dar un plus a la literatura chilena, con obras que rayan
en lo alternativo y experimental.
¿Qué es
Necro-files?
Es la colección en la que estoy a cargo en la
Editorial Cinosargo. Ahí van todos los libros relacionados con la violencia, el
gore y el terror... como un "Parental Advisory". Es un juego de
palabras entre: "Archivos de la muerte" y "Necrofilo".
“Necrospectiva vol. 2” y el libro "Carne"
de Daniel inauguraron esta colección.
¿Cómo se
enfrenta a la crítica y qué has asimilado de este proceso?
He tenido buena crítica en distintos blogs, de Chile
y extranjero.... eso te motiva a seguir y a creerte el cuento de que
"estás haciendo lo correcto".
¿Hay algo de
Pablo Espinoza Bardi en expresiones artísticas distintas a la literatura?
Me gusta el dibujo y la pintura... es algo que
quisiera retomar.
¿En qué
proyecto narrativo te encontramos hoy, Qué podemos esperar para este año?
Este año tengo un proyecto de carácter personal, es
difícil que saque algo. Pero si estoy trabajando en el "Necrospectiva vol
3: El Pueblo de los Putrefactos", en el que se refleja las perversiones
humanas llevadas al límite. Va bien avanzado. También tengo pensado hacer una
novela para más adelante: Disjecta Membra.
¿Disjecta
Membra es sobre la misma temática?
No, trato de que cada libro posea un "alma"
distinta. No repetir la fórmula. De Disjecta
Membra tengo tan sólo la idea, un bosquejo mental. Pero a modo de “spoiler”
te podría decir que es una mezcla de los 3 “necros”. Algo brutal.
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